La empresa Inesfly Corporation lidera el proyecto NECOTDIM contra el cotonet.

  • Inesfly Corporation seleccionada por la AVI para desarrollar un innovador proyecto para el control de plagas en el sector citrícola de la Comunidad Valenciana.
  • Se espera obtener el prototipo de un nuevo producto fitosanitario que demuestre eficacia en el control de pseudocóccidos y hormigas en cítricos y caquis, así como un mínimo impacto medioambiental y residuo cero en frutos.

La empresa Inesfly Corporation ha sido una de las entidades beneficiarias del Programa de Proyectos Estratégicos en Cooperación 2021 que concede la Agencia Valenciana de Innovación (AVI) perteneciente a la Generalitat Valenciana. Gracias a la subvención concedida se pondrá en marcha un proyecto pionero de investigación y desarrollo de nuevos tratamientos fitosanitarios para el control de diversas especies de plagas de pseudococcidos, comúnmente denominados cotonet, y hormigas en los cultivos de cítricos y caquis sin que haya residuo de plaguicidas en los frutos y que tenga un mínimo impacto medioambiental.

El proyecto NECOTDIM contará con una ayuda económica total de 589.545€ para los próximos dos años y medio y en él participan también el Instituto Valenciano de Investigaciones Agrarias (IVIA), la Universitat Politècnica de València (UPV), la cooperativa Coarval y el grupo cooperativo Intercoop.

Importancia del proyecto

Fruto dañado por plaga de D. aberiae.

Los pseudocóccidos son una de las principales plagas que afectan actualmente a los cultivos de cítricos (Delottococcus aberiae De Lotto y Planococcus citri Risso) y caqui (Pseudococcus longispinus Targioni-Tozzetti y Pseudoccocus viburni Signoret) de la Comunidad Valenciana. Producen pérdidas económicas que ascienden a 40 millones de euros y que en esta campaña ya se dan por perdidas entre 70.000 y 80.000 toneladas de caquis, según datos de la Asociación Valenciana de Agricultores (AVA-Asaja).

Estas pérdidas son debidas a que el sector citrícola actualmente está carente de soluciones eficaces para el control del cotonet ya que no existen enemigos naturales que controlen de forma natural esta plaga y porque, además, no hay métodos de control que no produzcan deposiciones de residuos de fitosanitarios en el medio en el que se aplican y que desarrollan resistencias a los insecticidas.

La pintura insecticida como nueva estrategia de control de plagas agrícolas

Es un hecho científicamente constatado que la resistencia de las plagas a los insecticidas es cada vez mayor, debido en gran medida al uso irracional y excesivo de productos químicos que ha ocasionado también una alta toxicidad para las personas y para el medio ambiente. Este problema ha hecho que se busquen alternativas eficaces para el control de insectos y vectores, respetuosas con el medio ambiente y con la salud de las personas. El Instituto Valenciano de Investigaciones Agrarias (IVIA) demostró a través de varios ensayos que es posible controlar las poblaciones de hormigas en cítricos mediante la aplicación de una pintura insecticida experimental basada en clorpirifos y piriproxifén aplicada en el tronco de los árboles.

Esta pintura insecticida fue desarrollada por Inesfly Corporation a partir de su tecnología patentada de microencapsulación polimérica que permite la liberación lenta de los principios activos del producto. Esta tecnología ha sido empleada para fabricar diversas soluciones insecticidas cuyas principales fortalezas son su alta eficacia residual y su bajo impacto toxicológico. 

Los productos de Inesfly Corporation han sido evaluados con buenos resultados frente a plagas urbanas como cucarachas e insectos vectores de enfermedades infecciosas como la malaria, Mal de Chagas, dengue, Zika o leishmaniasis a través de aplicaciones en interiores de viviendas para prevenir las picaduras de esos insectos. 

La persistencia proporcionada por la tecnología de microencapsulación de Inesfly Corporation posibilitará realizar un único tratamiento por campaña, que supera las actuales soluciones con necesidad de frecuentes aplicaciones. En cuanto a la seguridad alimentaria,
el tratamiento propuesto supone residuo cero de plaguicidas en los frutos dada su aplicación localizada en el tronco y con muy bajas probabilidades de transporte por parte de los insectos o incluso presencia en el fruto por vía sistémica.